El cuerpo es el vehículo por el cual experimentamos todo en este mundo. Cuídalo y quiérelo para que puedas vivir la mejor vida que quieres.
La Medicina Ayurveda nos brinda consejos y hábitos saludables para sentirnos ligeras, claras y en armonía. Si nos detuviéramos unos minutos para pensar en todo lo que hace el cuerpo humano por nosotros, nos sentiríamos llenas de asombro, de gratitud y de alegría al tenerlo.
Me gusta la idea de verlo como un templo, como un espacio sagrado que merece respeto y cariño, el lugar donde reside el alma. Para que esta alma pueda florecer, nos dice Ayurveda, que el cuerpo debe estar sano, fuerte y feliz.
Reencuéntrate con tu cuerpo
Con todo lo anterior, date un momento para sentirte, para sentir tus pies en la tierra, tus piernas que te llevan a todos lados, tus caderas que bailan, tu abdomen que da vida y donde reside tu fuerza interna. Siente como late tu corazón sin parar, siente tu brazos y tus manos que te permiten abrazar, crear y expresarte de tantas maneras diferentes. El amor propio comienza cuando decidimos escuchar a este cuerpo tan maravilloso, cuando aquietamos la mente lo suficiente para escuchar lo que nos dice esa voz interna sabia y verdadera.
¿Y a ti, qué te dice esa voz hoy? Tal vez que todo está bien y en armonía, tal vez nos dice que nos falta energía, que esa indigestión crónica no está bien, o que ¿es hora de soltar unos kilitos de más?
Sea lo que sea que te dice hoy tu cuerpo, te quiero compartir los siguientes consejos que nos regala Ayurveda, pasos sencillos y fáciles que te invito a probar. Te darás cuenta con ellos que el cuerpo responde a lo que tu le pides, a lo que tu le das. Comprueba que la salud y el bienestar están en tus manos y que lo que haces realmente cuenta.
Dinacharya, la rutina que debes seguir para empezar el día
La rutina diaria, también conocida como dinacharya, es un ritual de hábitos maravillosos para empezar el día.
- Despierta lo más temprano que puedas, antes del amanecer es lo ideal. Puedes empezar adelantando 15 minutos a tu despertador hasta que poco a poco llegues a la hora deseada.
- Usa tu limpia lenguas, esto ayuda a estimular órganos internos y a eliminar toxinas acumuladas durante la noche.
- Toma una taza de agua tibia con limón.
- Limpia tus fosas nasales con el jalneti, esto también estimula la digestión y te da claridad mental.
- Estira tu cuerpo, medita unos minutos si es posible.
- Cepilla tu cuerpo en seco para estimular la circulación y mover toxinas y date un masaje ayurvédico con aceite para masaje al menos tres veces por semana.
La comida es fundamental
Es importante comer a la misma hora todos los días. El desayuno ligero, la comida principal entre 12 - 2 pm y la cena alrededor de tres horas antes de dormir. Tus alimentos deben verse y saber bien.
Es verdad que somos lo que comemos entonces escoge bien lo que le das a tu cuerpo y disfrútalo en un lugar agradable, con buena compañía, sin televisión ni celular.
Saborea cada bocado masticándolo bien, esto ayuda a que la digestión sea mejor y a sentir cuando el cuerpo está realmente satisfecho. La manera en que comemos es igual o hasta más importante a lo que comemos entonces intenta comer en paz.
Puede ser también que tengamos la idea de que los productos light son saludables, pero a veces estos alimentos, para hacerlos saber bien, tienen ingredientes artificiales y procesados que no lo son tanto. Escoge tus alimentos lo más natural que se pueda y fíjate en los ingredientes que traen las cosas. Si el producto tiene ingredientes impronunciables, o algún edulcorante está dentro de los primeros 3, es mejor escoger otra cosa.
Intenta que tus bebidas sean al tiempo o calientes y aprovecha las propiedades de las especies y plantas disfrutando de tés herbales o tisanas.
La habilidad que tenemos para amarnos a nosotras mismas define cómo nos sentimos en nuestro cuerpo, en nuestras relaciones y en todo lo que hacemos. Haz el compromiso de hablarle con cariño, cuídalo, hónralo y dale lo que necesita, todos los días, para florecer. La magia está en la constancia y dedicación.
Protege tu templo y cuando te equivoques, ámate más. Verás la hermosa divinidad de la que estás hecha y tu mundo será inmensamente mejor.